Está es una hermosa historia que quiero contarles ... este tipo de acontecimientos ocurren constantemente en los matrimonios de personas de avanzada edad ... espero les guste.
En un pequeño pueblo en algún lugar alejado del campo un ... médico de familia ... visita a uno de sus pacientes más ancianos ... al que conoce desde hace décadas ... y se encuentra con que le habre la puerta la esposa muy preocupada ... antes de que la pueda saludar ... le indica con un susurro insistente que no debe permitir que su marido se entere de lo malo que está.
Los médicos le han dicho la verdad ... de manera que sabe de que su marido se está muriendo ... pero a el no le han dicho nada los médicos del hospital ... porque les insistí en ello para que no pierda las esperanza ... el médico de cabecera no dice nada y sube al piso de arriba para visitar al paciente ... la esposa se limpia las lágrimas de los ojos delante de la puerta y demuestra en la habitación una alegría forzada mientras se encuentra alrededor de su esposo.
El médico me ha dicho que espera que muy pronto te podrás levantar de nuevo ... eso será estupendo ... no te parece ??? ... el hombre ... tendido en la cama ... asiente con la cabeza y esbosa una sonrisa ... llaman a la puerta y la mujer debe de abandonar la habitación ... pero antes le manda una mirada severa al médico.
En cuanto deja la habitación ... el anciano llama al médico con un susurro ... querido doctor ... nos conocemos desde hace muchos años ... de manera le pido que me haga un último favor ... no le explique a mi esposa como estoy realmente ... sé que pronto moriré ... pero ella no podría soportar y no le puedo quitar la esperanza ... entonces el médico le explica que al poner el pie en su casa su esposa le ha pedido exactamente lo mismo.
El anciano comienza a llorar ... la esposa regresa ... lo ve y le grita al médico ... le prohibi que se lo dijera !!! ... en ese momento el hombre la interrumpe y le explica lo que ha pasado en realidad ... los dos se abrazan entre sollozos y el médico decide que ha llegado el momento de despedirse en silencio.-